30 de mayo de 2013

PERDONAR A DIOS

Perdonar a Dios.
Por: Waldo Castro

Al estar presente en una reunión con un conferencista de Transformación interior, escuché que dijo que una de las soluciones para la amargura era “perdonar a Dios".
Cuando una persona no está conforme con su apariencia física o con un suceso que dejó cicatrices emocionales o físicas en su vida, se le aconseja que perdone a Dios por haber permitido que eso sucediera.
En Rut 1:13 Noemí estaba amargada contra Dios y hasta explicó a sus dos nueras que tenía derecho a estar más amargada que ellas porque se habían muerto su esposo y sus dos hijos. Según él, esta es la clase de situación en donde se aconsejara perdonar a Dios por haberlo permitido.

Estoy convencido de que hablar de “perdonar a Dios” es blasfemia. Dios es bueno (Salmo 103); Dios es amor (1ª Juan 4:8); Dios está lleno de bondad (Marcos 10:18); Dios es esperanza (Romanos 15:13); Dios es santo (Isaías 6:3); Dios es perfecto y no comete errores. (Deuteronomio 32:4; Hebreos 6:18). Jamás habrá necesidad de perdonarlo. Este concepto de perdonar a Dios es uno de los intentos del ser humano de crear a Dios a imagen del hombre y este concepto tiene su origen en la Nueva Era. Demuestra una total ignorancia e incomprensión de que Dios, en Su amor, tiene múltiples propósitos y maneras de operar y lleva a cabo tales propósitos por medio de las experiencias que atravesamos. ¡Sí pudiéramos aprender la realidad de “Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad” (2ª Corintios 12:9), muchos pensamientos cambiarían de nuestra vida.

7 de mayo de 2013

ORDENACIÓN 2012 Mensaje #03


ORDENACIÓN 2012
Mensaje #03
El Instrumento que Trilla de Dios

Les traigo saludos a ustedes en la Red Apostólica PUEBLO en el nombre de Jesucristo. Cada año el
crecimiento que Dios nos da en la Red me asombra por medio de las buenas obras cumplidas de ustedes. Su
dedicación y su determinación para hacer este arduo trabajo han cosechado una gran recompensa en el reino
de Dios y me han inspirado muchísimo. Cada año podemos decir que hemos alcanzado más comunidades que
no han oído el evangelio antes y que hemos cosechado más almas para el Reino de Dios.
Doy gracias a Dios que la mayoría de los pastores y los líderes en esta Red han cumplido con el arduo
trabajo este año para llegar a ser líderes mejores y más fuertes para la gloria de Dios. Personalmente doy
gracias a ustedes por su cooperación. Es con mucha humildad que estoy aquí en su presencia pues ustedes son
unos gigantes de la fe. Cada uno de ustedes es extremadamente importante para mí, para el pastor Waldo y
para la Red.
Mi mensaje para ustedes hoy es del libro de Isaías. En el libro de Isaías hay un grupo de mensajes que
se llama, “las canciones de los sirvientes”. El título de mi mensaje es, “El Instrumento que Trilla de Dios”
Estas canciones se dividen en tres tipos dependiendo de su contexto. El profeta Isaías menciona tres